Avesedari, la asociación con la que nació Glifing, ofrece becas a familias e instituciones que atienden a niños con necesidades educativas especiales que se encuentran en situación de vulnerabilidad social. Durante 2021, se destinaron casi 10.000€ a becas, con las que se atendieron a un centenar de usuarios, aparte del resto de proyectos que lleva a cabo la asociación, gracias a diversos acuerdos y colaboraciones con entidades y asociaciones de todo el mundo.
El proyecto solidario se centra también en la formación y la investigación, y tiene firmados varios convenios de colaboración con universidades y otras entidades de investigación.
La investigación es uno de los elementos clave del éxito de Glifing y de su continua evolución, en lo que se refiere a nuevas lecciones, nuevos productos y proyectos.
Avesedari nace en 2009 como la iniciativa de un grupo de profesionales con vocación de aportar soluciones innovadoras para el aprendizaje de la lectura. Se inicia con un trabajo de investigación sobre las dificultades de este tipo de aprendizaje, en colaboración con la Facultad de Psicología de la Universidad de Barcelona (UB).
La historia de Avesedari está íntimamente relacionada con la de Glifing, ya que el Método de Entrenamiento de la Lectura que proponemos es el resultado de esta primera búsqueda de su creadora, Montserrat Garcia.
Durante 2021, destinamos 9.334€ a Becas Avesedari, con las que se beneficiaron 93 usuarios de diferentes países del mundo.
93 becas Avesedari otorgadas a usuarios Glifing el año 2021
Argentina
Honduras
España
Así, de los 93 usuarios beneficiarios de las becas durante el pasado año, 29 son usuarios de gabinetes en Argentina, 11 son de la Iglesia Metodista de Honduras y el resto son usuarios Glifing de nuestro país. Para poder ofrecer estas becas, Avesedari dispone de un fondo económico que se destina a cubrir, total o parcialmente, las terapias de reeducación que puedan necesitar alumnos de familias con dificultades económicas. Este fondo económico procede de las cuotas anuales de los socios, de las actividades que organiza la asociación y de una asignación de Glifing.
Entre estas actividades, en mayo de 2021, Avesedari celebró el congreso “Corazón Lector, 1er Congreso Online sobre el aprendizaje lector” que, a pesar de ser gratuito, contemplaba la posibilidad de hacer un donativo para Becas Avesedari, lo que permitió conseguir 1.675€.
Glifing también recibe algunas aportaciones de los contratos firmados con los ayuntamientos como el de L’Hospitalet de Llobregat, Gavà o Llinars del Vallès, a través del cual hacen llegar Glifaula a las escuelas de sus municipios.
También cabe destacar otros proyectos solidarios de Avesedari con casas de acogida, hospitales, orfanatos u otras instituciones, que usan Glifing sin coste alguno. Como se ha hecho recientemente con la Fundación Nuestros Pequeños Hermanos en Honduras, con la UADLE (Unidad de Atención a las Dificultades de Aprendizaje) de la Universidad de Salamanca o con FundaNeed (Fundación de Atención a las Necesidades del Desarrollo) también de Salamanca.
Estos proyectos por sí solos pueden llegar a atender con Glifing a cientos de niñas y niños cada año, aparte de los 93 niños ya contabilizados.
Avesedari nace con la vocación de facilitar este proceso de conocimiento, detección e intervención en aquellos entornos que, por falta de recursos económicos o sociales, no se consigue atender a los niños en riesgo debido a sus dificultades de aprendizaje.
Por eso tiene firmados diversos convenios de colaboración con universidades y hospitales para incorporar mejoras y conocer mejor el entorno.
Entre las universidades, todo empezó con la Universidad de Barcelona, a la que se añadieron la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), la Universidad de Salamanca, la Universidad de Castilla La Mancha, la Universidad Internacional de Valencia, la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH ) y la Universidad de Santander (Bucaramanga – Colombia).
Y en cuanto a los hospitales, destaca la Unitat Neuro-Rehabilitació Oncologia Infantil de l’Hospital Sant Joan de Déu, l’Institut de Recerca Vall d’Hebron (VHIR), el Instituto de Neurología Cognitiva (Ineco).
Y, en Buenos Aires, el Hospital del Niño Dr. Ricardo Gutiérrez, el Hospital General de Agudos J.M. Penna y el Hospital J. M. Ramos Mejía.
